Instalar un cerramiento en una piscina es mucho más que una mejora estética. Es una inversión en seguridad, funcionalidad y confort. Ya sea para mantener el agua limpia, alargar la temporada de baño o proteger a los más pequeños, un cerramiento puede transformar completamente la experiencia de uso de tu piscina. Pero, como en cualquier mejora importante del hogar, una de las primeras dudas es: ¿cuánto cuesta?
En este artículo te explicamos los tipos de cerramientos disponibles, los factores que influyen en su precio y cómo elegir la mejor opción para tu espacio.
¿Por Qué Instalar un Cerramiento en la Piscina?
La mayoría de quienes instalan un cerramiento en su piscina lo hacen por razones prácticas. Sin embargo, los beneficios van mucho más allá de lo evidente.
Seguridad, limpieza y temporada extendida
Un cerramiento permite evitar accidentes, especialmente si hay niños pequeños o mascotas en casa. También ayuda a mantener la piscina limpia por más tiempo, reduciendo la caída de hojas, polvo o insectos. Y, si se opta por un sistema cubierto, es posible disfrutar de la piscina durante más meses al año, incluso en días más frescos.
Valor añadido para el hogar
Un cerramiento bien diseñado incrementa el valor de la propiedad. No solo por su aspecto visual, sino porque convierte la piscina en un espacio más seguro, accesible y fácil de mantener. Además, algunos modelos permiten aprovechar el área cubierta como zona de descanso o incluso como espacio cerrado multifuncional.
Tipos de Cerramientos para Piscina
La variedad de sistemas es amplia, y elegir bien dependerá del uso que quieras darle, del clima local y de tu presupuesto.
Cerramientos fijos, telescópicos y desmontables
- Fijos: Estructuras permanentes que cubren completamente la piscina. Son muy eficaces para climatizar y proteger todo el año, pero requieren mayor inversión y planificación.
- Telescópicos o retráctiles: Están formados por módulos que se deslizan o pliegan. Son muy valorados por su versatilidad: puedes abrirlos en verano y cerrarlos en invierno.
- Desmontables o bajos: Estructuras ligeras, fáciles de instalar y retirar. Ofrecen protección básica y una opción más económica para temporadas específicas.
Materiales habituales: policarbonato, cristal y aluminio
- Policarbonato: Ligero, resistente y con buen aislamiento térmico. Ideal para cubiertas curvas o telescópicas.
- Cristal: Más estético y elegante, pero también más pesado y costoso. Aporta mayor luminosidad y una visión clara del entorno.
- Aluminio: Se usa principalmente en la estructura de soporte. Resistente a la intemperie, no se oxida y permite acabados modernos.
¿Cuál es el Precio de un Cerramiento de Piscina?
Determinar el precio de un cerramiento para piscina no es tan simple como fijar una tarifa por metro cuadrado. Se trata de una solución personalizada, y su coste final depende de múltiples factores que deben analizarse con detalle.
Precio por metro cuadrado: lo que debes tener en cuenta
El precio por metro cuadrado puede variar notablemente según el tipo de cerramiento. No es lo mismo una estructura baja y desmontable que una cubierta fija en cristal con apertura motorizada. Por ejemplo, los cerramientos telescópicos de policarbonato suelen ofrecer una buena relación calidad-precio, combinando funcionalidad, resistencia y estética sin disparar el presupuesto.
Sin embargo, más allá del sistema elegido, hay elementos clave que influyen directamente en el coste final.
Factores que influyen en el coste final
- Tamaño de la piscina y altura del cerramiento: A mayor superficie o estructura elevada, mayor será la inversión en materiales y montaje.
- Tipo de apertura: Los sistemas motorizados o retráctiles tienen un coste superior respecto a las versiones manuales.
- Materiales: El uso de cristal, paneles de alta gama o acabados especiales incrementa el precio frente a opciones más básicas como el policarbonato.
- Diseño y personalización: Cuanto más se adapte el cerramiento al estilo de tu vivienda, mayor será la complejidad (y el coste).
- Condiciones del terreno: Instalaciones sobre suelos irregulares, con pendiente o con acceso difícil pueden requerir trabajos extra de preparación o anclaje.
Por eso, más allá de buscar una cifra exacta por m², lo más recomendable es solicitar un presupuesto detallado, ajustado al espacio real y al tipo de cerramiento que tienes en mente.
Cómo elegir el cerramiento adecuado para tu piscina
Elegir un cerramiento no se trata solo de ajustar el presupuesto. Estas son algunas claves que te ayudarán a acertar:
- Define el uso que le darás: Si buscas disfrutar de la piscina todo el año, apuesta por una estructura fija o telescópica con buen aislamiento. Si tu objetivo es simplemente protegerla durante los meses fríos, un cerramiento bajo puede ser suficiente.
- Piensa en el diseño: El cerramiento será parte del paisaje de tu jardín o terraza. Escoge un estilo que armonice con el entorno y la arquitectura de tu vivienda.
- Valora el mantenimiento: Algunos sistemas, especialmente los que usan cristal o materiales lacados, requieren más cuidado que otros. Elige materiales duraderos y fáciles de mantener si no quieres complicaciones a largo plazo.
- Consulta con profesionales especializados: Te ayudarán a elegir el sistema más adecuado según tus prioridades: estética, comodidad, aislamiento o facilidad de uso.
Un buen cerramiento no es solo funcional, también transforma el espacio y mejora la experiencia de uso de tu piscina.