Tipos de juntas para cortinas de cristal: ¿Policarbonato o imán?
Juntas para cortinas de cristal
Las juntas para cortinas de cristal son los elementos que se colocan entre los paneles de vidrio y los perfiles del sistema, y cumplen una función vital: sellar el espacio para evitar que entren aire, agua, polvo o ruido. Gracias a ellas, es posible transformar una terraza abierta en un espacio aislado y confortable durante todo el año, sin perder luz ni estética.
Además de su función de sellado, las juntas también contribuyen a la estabilidad estructural del sistema, protegen los bordes del vidrio y garantizan un deslizamiento suave de las hojas móviles. En resumen, son piezas pequeñas pero esenciales.
¿Qué tipos de juntas existen?
En el mercado podemos encontrar varios tipos de juntas, cada una con características específicas y aplicaciones distintas. Sin embargo, los dos modelos más comunes en los sistemas de cortinas de cristal son:
- Juntas de policarbonato
- Juntas de imán
Cada tipo tiene ventajas y limitaciones, por lo que la elección dependerá del tipo de instalación, el uso del cerramiento y las condiciones climáticas del entorno.
Juntas de policarbonato
Las juntas de policarbonato son las más utilizadas en cerramientos estándar. Están fabricadas con un material plástico transparente, resistente y flexible, lo que les permite adaptarse a la mayoría de sistemas sin afectar a la estética. Se colocan entre los paneles de vidrio para sellar los huecos y evitar filtraciones de agua o aire.
Estas juntas son fáciles de instalar y sustituir, por lo que resultan muy prácticas cuando se busca una solución funcional y económica. Son una buena opción para climas templados o para espacios que no están expuestos de forma constante a condiciones meteorológicas extremas. Su vida útil suele rondar los tres años.
¿Qué tipos de juntas existen?
Las juntas de imán funcionan mediante la atracción de polos opuestos y sellan herméticamente los espacios entre hojas al cerrarse. Este tipo de juntas ofrece un nivel de estanqueidad más alto que el policarbonato, lo que mejora tanto el aislamiento térmico como el acústico.
Son especialmente recomendables en zonas con clima adverso, viento constante o lluvias frecuentes. También son ideales si el uso del cerramiento es diario o si se busca una solución de larga duración con el menor mantenimiento posible. Su vida útil suele estar entre los 8 y 10 años
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Fotos de sistemas de cortinas con juntas instaladas
Al momento de elegir tus cortinas de cristal, no dejes de lado algo fundamental: contar con un profesional cualificado para la instalación. Un buen cerramiento no solo depende de los materiales, sino también de cómo se colocan.
Las juntas, tanto las de policarbonato como las magnéticas, cumplen perfectamente su función cuando están bien seleccionadas e instaladas. Son el complemento perfecto para transformar cualquier espacio en un ambiente más moderno, limpio y protegido, sin renunciar a la estética. Si estás pensando en renovar tu terraza o cerrar ese rincón especial de casa, este es el momento ideal para hacerlo realidad.
